Por qué elegir NetApp para DevOps

El ritmo de desarrollo de aplicaciones se ha acelerado hasta niveles sin precedentes. Según IDC, en los próximos cuatro años se pondrán en marcha cuatro veces más aplicaciones y servicios de los que se han puesto en marcha en los últimos 40 años. Se trata de un cambio muy drástico que ha obligado a las organizaciones a replantear su estrategia. Principalmente, se trata de utilizar las metodologías de DevOps para escalar la innovación de las aplicaciones e introducir nuevas funciones y funcionalidades en el mercado al ritmo que marca el mundo.

Dicho esto, en un mercado dominado por soluciones puntuales en silos, el camino hacia DevOps puede ser complicado y muchas organizaciones luchan por avanzar en él. De hecho, Gartner prevé que el 75 % de las iniciativas de DevOps no cumplirá las expectativas debido a problemas de aprendizaje y cambio organizativos. El éxito de la transición de DevOps depende de la creación de una cultura de colaboración, comunicación e integración dentro de la tecnología.

NetApp está pensado para DevOps

En NetApp, contamos con una visión integral de la ayuda que prestamos a nuestros clientes para que puedan alcanzar el éxito con DevOps. Con este fin, ofrecemos un valor único en seis funcionalidades centrales que, en nuestra opinión, potencian a los equipos de DevOps para que puedan progresar de la forma adecuada.

Si tienes un proceso manual y es algo que tienes que hacer más de una vez, el mantra es: Automatízalo. Prográmalo. No programes solo aplicaciones o configuraciones de pruebas y puestas en marcha: programa todo. Al tratar todo lo que los desarrolladores necesitan como código, obtienes un método estandarizado y controlado para incorporar proyectos, aplicaciones y equipos.

Todo en forma de código (EaC, por sus siglas en inglés, «Everything as Code») es esencial para conseguir una estrategia de contenedor. Sin esta estrategia, tendrás que administrar manualmente demasiados contenedores y clústeres y nunca alcanzarás la escala nativa de la nube. La automatización a través de EaC es la única forma de aumentar la proporción entre servidores o contenedores y administradores. Tener todo integrado en un sistema de gestión de control de código fuente, como Git, así como en el control de versiones, te permite tener siempre un dato de «última configuración válida conocida» para toda la plataforma, las aplicaciones y la infraestructura.

NetApp hace que los desarrolladores y los equipos de pruebas, de calidad y de operaciones puedan consumir recursos de infraestructura más fácilmente (por ejemplo, con volúmenes de almacenamiento persistente) en forma de código; y todo ello a partir de herramientas que son habituales en la canalización de DevOps. Entre los ejemplos se incluyen las API de almacenamiento de NetApp y las integraciones de IAC con herramientas como Ansible, Docker, Kubernetes y OpenShift.

En este mundo incierto, necesitas ser capaz de actuar con rapidez y agilidad con los recursos. Esto no siempre es posible con las infraestructuras tradicionales, que dependen de procesos manuales que no están optimizados para aplicaciones con estado. Necesitas una canalización de DevOps que aúne sin problemas el aprovisionamiento, el desarrollo, las pruebas y la puesta en marcha. Para iterar con mayor rapidez, los desarrolladores necesitan que cada proceso se desarrolle de forma autónoma, automatizada y bajo demanda.

NetApp ofrece una infraestructura en la que se priorizan las API con integraciones profundas y automatización incorporada que te permite configurar la canalización rápidamente y aprovechar los contenedores de Kubernetes y las aplicaciones de terceros. Nadie logra la persistencia del almacenamiento y la nube nativa como NetApp. Te ayudamos a crear una canalización de DevOps preparada para la empresa donde aplicaciones con estado y con una gran cantidad de datos se integran sin problemas con las nubes más grandes del mundo.